que vivía en un palacio
no tenía más colores
que el color blanco de su mano.
Pero un día muy bonito
el cielo azul, los pajaritos,
los colores de las flores.
Un mar de crayones
invadió todo el palacio.
¡Que extraño!
Gritó la blanca princesa,
y dijo:
- ¿Cómo es posible
si todo acá es blanco?
Pues lo que habia pasado
es que el mar con los crayones
se llevó los colores del arcoiris
y se fueron al castillo.
Desde aquel día la blanca princesa
dejó de ser blanca y se volvió muy colorida
una princesa acrayolada.
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